martes, 3 de septiembre de 2013

QUIZÁS PODRÍA



El instinto
que nace de nuestra esencia más pura
no cae tan fácilmente en las trampas
del pensamiento racional 
o las emociones.
¿Es el instinto el que presagia
los sucesos? ¿O sencillamente
es la semilla que los origina?

Quizás podría
escribir un par de versos hoy
que calmasen
con aliento las heridas.

Quizás podría
componerte una canción de amor
que te hablase
como te hablan mis caricias.

Pero es más fácil
desnudar mi alma junto a ti
entre velas
y unos tragos de ginebra.

Y aunque no sepas
que por más que lo he intentado evitar
ya has dejado
entre mis rastros una estela.

Estrib.
No sé cómo decirte,
no sé cómo decirte
que me cuesta confiar
en los finales felices.

No sé cómo explicarte
sin que te suene extraño
que he empezado a no creer
en los milagros mundanos.

No sé como quererte bien
No sé como quererte
sin que me cueste tanto...

Quizás podría
esperar que vuelvan a crecer
con la lluvia
las semillas esparcidas.

Quizás podría
entregarme a ratos al placer
que se pierde
en mis mañanas de oficina.

O enredarme
con promesas que nunca cumpliré
y que dejan
siempre cabos por atarse.

Entretenerte
con los mismos cuatro acordes otra vez
mientras sueño
con marcharnos a otra parte.